martes, 28 de abril de 2015

Recursos Culturales y Folklóricos RECURSOS CULTURALES Y FOLKLÓRICOS DE TEBAR 2: LOS MAYOS


El canto de los mayos tan tradicional en estas tierras tiene en la villa de Tébar sus propias particularidades, existiendo como en la mayoría de los pueblos dos Cantos del Mayo:
¨        El Mayo de la Virgen, que se canta el primero, en el patio de la Iglesia.
¨        Y él llamado Mayo de las Mozas, el cual, se denomina así, porqué era el que los quintos del pueblotradicionalmente cantaban a sus novias o amigas.

El primer Mayo o de la Virgen se canta a medianoche en el patio de la Iglesia. 





Tras el Mayo de la Virgen, es costumbre que los que lo canten marchen después a cantarle el mayo al alcalde o alcaldesa de la Villa de Tébar.

El otro con diversas modificaciones puntuales lo van cantando por la noche y a la mañana del día 1 de mayo por el pueblo.

lunes, 27 de abril de 2015

TÉBAR Y SU PATRIMONIO NATURAL 5: LAS FUENTES (LA FUENTECILLA Y LA FUENTE PERRERA)

               Antaño, en el termino municipal de la villa de Tébar, existían numerosas fuentes y manantiales de agua. Estas fuentes se caracterizaban por manar agua durante casi todo el año; aunque desgraciadamente, hoy en día muchas de ellas han desaparecido por la mano del hombre.

              Estas fuentes se hallaban en su mayoría entre las faldas del Cerro Mirabueno, en las proximidades del pueblo (este cerro es el que existe junto a las naves, enfrente del parque de los Rulos) y el Cerro de la Médica. Entre las más conocidas destacaban tres:

  1. La Fuente Perrera, se encuentra situada cerca del pueblo, en la ladera del Cerro Mirabueno, junto al camino de la Barga, antes de llegar a los Pinos de Barba.
  2. La Fuentecilla, se encuentra situada, cerca del pueblo, hay dos formas de llegar; el primero de ellos siguiendo el camino de la Barga hasta el primer cruce, a continuación siguiendo el camino que va junto al cerro Mirabueno, hasta llegar a un segundo cruce tomando el camino que sube hacia el cerro; el otro de ellos es más corto, siguiendo el camino que sale junto a las naves, en apenas quinientos metros nos encontramos con la Fuentecilla.
  3. Y la Fuente del Ave, de las tres, es la única desaparecida; puesto que se encuentra situada debajo de la Autovía Madrid-Valencia, en las faldas del Cerro de la Médica.


paraje de la Fuentecilla

la Fuentecilla


viernes, 24 de abril de 2015

TÉBAR Y SU PATRIMONIO CIVIL 4: CASAS DE HIDALGO QUE PERTENECÍAN A LOS VILLANUEVA

 La familia Villanueva fue otra de las familias más poderosas que vivieron en nuestro pueblo descendían de una noble familia de hidalgos que procedentes de Alarcón se trasladaron a vivir a Tébar a finales del siglo XVI y principios del XVII. Aunque, no sería hasta mediados del siglo XVII, cuando los Villanueva se consoliden en Tébar de la mano de Mateo Villanueva Palomares (nacido en Tébar antes de 1655), quien puede ser considerado como la cabeza de esta rama familiar, que fue la más importante de Tébar en los siglos XVII y XVIII. Se casó con Catalina Montoya (nacida en Tébar antes de 1660), y entre sus hijos, se encuentran: Don Pedro Villanueva Montoya, nacido en Alarcón antes de 1680, que era vecino de Tébar a mediados del siglo XVIII.  Don Mateo Villanueva Montoya, que era el alcalde de Tébar a mediados del siglo XVIII. Se casó con Juana Francisca Villaviciosa, emparentando así con el Señorío de los Villaviciosa, otra de las familias más pudientes de Tébar.

       1. Casa de Requena,
Ubicada entre la plaza principal del pueblo o de la Constitución y la calle de la Reina, la calle principal de la villa. Se trata de una casa de principios del siglo XVII, reformada en 1970 con el fin de hacerla habitable,  aunque manteniendo una fachada muy austera, con una portada con dos columnas toscanas de piedra caliza (que antiguamente hacían juego con otras dos  en el patio de la casa). Seguramente ésta  sea la casa que la  familia Villanueva construyó cuando se trasladó a vivir de Alarcón a Tébar entre finales del siglo XVI principios del siglo XVII.
       2       Casa de la Fundación Moreno Baíllo,
La casa de la hoy Fundación Moreno Baíllo, esta ubicada en el centro de la calle Isauro Gabaldón, en lo que fueron las afueras de la villa de Tébar a finales del siglo XVIII y principios del XIX.


        Esta nueva casa de los Villanueva, se empezó a construir unos siglos después de la anterior, probablemente a principios del siglo XIX, el motivo de dicha construcción, fue que la otra casa ubicada en el centro del pueblo se les quedaba  poder almacenar los grandes recursos agrícolas que está familia había llegado a tener, con cuadras, graneros y bodega de vino. El exterior es muy sobrio, casi un muro sin ventanas, destacando sólo una puerta de hierro forjado de principios del siglo XX, de los hermanos Vallés, que da acceso a un patio, que sirve para distribuir las distintas habitaciones. 


La que fue la nueva casa de la familia Villanueva, hoy de la Fundación Moreno Baíllo, se denomina así en honor a sus últimos propietarios: don Fernando Moreno Baíllo y su esposa doña Concha, quienes procedentes de Belmonte, compraron la mayoría de las tierras los Villanueva, convirtiéndose en los grandes terratenientes del pueblo. A la muerte de don  Fernando y doña Carmen, sus tierras pasaron a manos del Obispado de Cuenca por donación de doña Carmen, convirtiendo todo el patrimonio de esta familia en la Fundación Moreno Baíllo, cuyos patronos son el Obispo de Cuenca y el Ayuntamiento de Belmonte, ninguneando al de Tébar.
1 casa de Requena



2 entrada fundación moreno baillo

3 casa de la FUNDACIÓN MORENO BAILLO

jueves, 16 de abril de 2015

TÉBAR Y SU PATRIMONIO NATURAL 5: LOS CERROS AISLADOS (SANTA QUITERIA, TERRONES I, Y TERRONES II )

   Este conjunto de cerros aislados se encuentran localizados al sureste de la localidad de Tébar, entre la carretera local CUV-8307 que conduce hasta el cruce con la N310 que une Manzanares con Villanueva de la Jara y la Autovía de Valencia la A3.

     Estos cerros aislados o testigos son el resultado que las grandes avenidas del  Júcar y sus afluentes fueron produciendo durante millones de años al sur de las últimas estribaciones de la Serranía de Cuenca, en la llamada sierra del Cañavate. 

    La altura de estos cerros no sobrepasa los novecientos metros sobre el nivel del mar, pero parecen más elevados, por su situación geográfica; como si fueran islas en medio del mar.

   La formación de estos cerros es más o menos similar de ahí que el envite de las fuerzas erosivas de la naturaleza se hallan limitado a moldearlos llevándose los materiales más endebles. Aunque cada uno de estos cerros tiene sus peculiaridades y ya desde antiguo lo supieron aprovechar; puesto que desde cualquiera de las tres aplanadas cumbres se divisan perfectamente y eran fáciles de defender. Estos tres cerros aislados no son los únicos existen varios pequeños cerrillos y alguno un poco mayor que junto a estos forman un paisaje totalmente ondulado. 

     El Cerro de Santa Quiteria, llamado así por que en su cima se encuentra la ermita de Santa Quiteria, la patrona de Tébar; se encuentra situado en las proximidades de la carretera local CUV-8307 desde la que puede verse en todo su esplendor; esta algo retirado de los otros dos a aproximadamente un kilómetro y medio del primero de los otros. 

   El Cerro posee una serie de particularidades que lo hacen único: tiene una forma cónico-ovalada, es rico en flora especialmente en plantas aromáticas,  aunque la vegetación arbórea escasea; además es él más elevado de los tres con 898 metros sobre el nivel del mar por lo que permite controlar desde su cima un amplio territorio y es muy fácil el acceso a su cima, debido a que existe un camino que lo va bordeando hasta la cumbre.

     El Cerro de Los Terrones I, se encuentra  a algo más de un kilómetro del Cerro de Santa Quiteria, en una posición intermedia, entre este y el Cerro  Terrones II, más conocido como el Cerro Pelao. Este Cerro es el gran desconocido pues, en contraste con los otros dos posee una abundante vegetación arbórea: pinos, matorrales, plantas aromáticas y olivos en sus laderas que lo hacen pasar desapercibido. Este cerro con sus 889 metros sobre el nivel del mar ocupa la segunda posición.

    El Cerro Terrones II o como es más conocido en Tébar, como el Cerro Pelao, se encuentra situado a unos cuatrocientos metros del anterior. Este cerro tiene una particularidad que es ser el menos elevado de los tres con 875 metros sobre el nivel del mar; y aunque es más bajo que Los Terrones I, curiosamente es más conocido que el anterior,  porque al contrario que Terrones I, su parte más elevada esta casi  completamente desprovista de vegetación arbustiva, una característica que comparte con el Cerro de Santa Quiteria.


SANTA QUITERIA

TERRONES I

TERRONES II O PELAO

VISTA DE TERRONES I Y SANTA QUITERIA DESDE LA CIMA DEL TERRONES II O PELAO

martes, 14 de abril de 2015

TÉBAR Y SU PATRIMONIO CIVIL 3: CASAS DE HIDALGO QUE PARTENECÍAN A LOS VILLAVICIOSA



 La familia Villaviciosa fue una de las familias más poderosas que vivieron en nuestro pueblo.

1. Casa de Vicente Chiva Carrión 

La casa actual ha sido reformada para adecuarla a las condiciones de vida de hoy en día; aunque la fachada se conserva tal y como se ideó a  finales del siglo XVIII. Si bien, anteriormente ya había una casa perteneciente a la misma familia, pues, esta datado, que a mediados del siglo XVIII, Don Francisco de Villaviciosa, que era el personaje  más importante de esta familia, y que también era Señor de Reíllo, tenía esta casa noble en Tébar (hoy dividida entre la casa de Vicente Chiva y la que fue palacio del obispo Felipe Antonio Solano), aunque constaba como vecino, en el catastro de Ensenada de la villa de Campillo de Altobuey, población que le pagaba un censo. 

En 1770, unos años antes de hacer la fachada de la casa que vemos actualmente, el Señorío de Reíllo pasó a manos de Mateo Villaviciosa, quien seguramente fue el que mandó hacerla a finales del XVIII,  con una fachada muy austera de piedra de sillería y con una portada adintelada, con las piedras de sillería a modo de dinteles con desigual longitud, siendo la clave más alta que las demás. Se conserva también una de las tres rejas originales, aunque a simple vista es difícil distinguirla.  


2. Casa de los Castillos


      La fachada de la casa de los Castillos es un ejemplo de arquitectura noble rural manchega de la segunda mitad del siglo XVII o principios del XVIII; se encuentra situada en la calle la Reina, la calle principal del pueblo, que une la Plaza de la Constitución con la Plaza del Olmo.
Sobre esta casa, cabe decir, que no conocemos exactamente si perteneció a los Villaviciosa; puesto que, existe la posibilidad de que esta fuera una de las sedes de la antaño poderosa Mesta, dado que Tébar fue un importante lugar de paso durante siglos de grandes rebaños trashumantes, que discurrían por las dos grandes cañadas que recorren el termino de Tébar, la Cañada Real Conquense y la Cañada Real Andaluza. 

      La fachada recorre todo el frente de la casa, con una forma prismática rectangular, y paredes de piedra enrasadas con mortero de cal y arena, y encaladas. En la planta baja, se abren tres ventanas, dos de ellas con rejas de forja de estilo barroco, y en la planta primera dos pequeñas ventanas, todavía con sus contraventanas de la época, con cuarterones de madera.   

El elemento más destacado es la portada de piedra tallada con pilastras con capiteles a los lados, que sostienen un doble entablamento con cornisa moldurada, coronada por tres pináculos rematados en bolas; el central tiene una cruz dentro de un círculo. 

La fachada de la casa de los Castillos es representativa de la arquitectura noble manchega de estilo barroco, construida con piedra cubierta con mortero y encalada, con rejas de hierro forjado. Su buena conservación y las pocas alteraciones que ha sufrido, son de sumo interés para el conocimiento de la historia de la arquitectura rural de la Edad Moderna en la región castellana.   

Sus últimos propietarios la vendieron al Ayuntamiento de Tébar hace unos pocos años, conociéndose con el nombre del apellido de esta familia.Y en la actualidad, ha sido convertida por el ayuntamiento en un centro cultural y sala de exposiciones.


CASA DE VICENTE CHIVA


CASA DE LOS CASTILLO SALON CULTURAL PORTADA
CASA DE LOS CASTILLO SALONCULTURAL INTERIOR PISO SUPERIOR



jueves, 9 de abril de 2015

TÉBAR Y SU PATRIMONIO NATURAL 4: LOS SUMIDEROS DE TÉBAR

Los sumideros se encuentran localizados a unos tres kilómetros de Tébar,  para llegar a ellos debemos coger la carretera de Tébar al embalse de Alarcón (CUV-8307), y en el primer camino que sale junto a una loma, a unos cien metros están los famosos sumideros de Tébar.

Antes de describirlos, voy a explicar brevemente de lo que estamos hablando; un sumidero. es un tipo de dolina circular que actúa como desagüe natural para el agua de lluvia o para corrientes superficiales como ríos o arroyos. Se suelen forman en suelos de piedra caliza, justamente el tipo de roca  más predominante en Tébar, donde se filtra agua ligeramente ácida que poco a poco carcome el subsuelo hasta que se forma una cueva subterránea y el agua que se sigue filtrando provoca el derrumbe del techo de dichas cuevas hasta que se forma un sumidero.

Los sumideros de Tébar están situados en el centro un pequeño valle que corre casi en línea recta  desde la laguna del Lavajo, por cuyo centro corre encajonada la reguera rambla pseudonatural. 
La visita a los sumideros es espectacular cuando ha llovido abundantemente,  la laguna del Lavajo se ha desbordado y los terrenos de labor ya no admiten más agua y evacuan las aguas sobrantes a la reguera; además, es recomendable ir con alguien del pueblo que conozca el lugar, pues están sin señalizar, y es muy fácil perderse.